Trabajo de Preparación

- Una Caminata Perfecta -

Jesús David Blas Martínez
Coatzacoalcos, Veracruz / 24 mayo
TCDC
Fotografía:Perla Juárez

Levántate, oh amiga mía, hermosa mía, y ven.

Cantares 2:8-10

8 ¡La voz de mi amado!

He aquí él viene Saltando sobre los montes, Brincando sobre los collados.

9 Mi amado es semejant

al corzo,o al cervatillo.

Helo aquí, está tras nuestra pared, Mirando por las ventanas, Atisbando por las celosías.

10 Mi amado habló

y me dijo:

Levántate, oh amiga mía, hermosa mía, y ven.

Dios les bendiga amados hermanos les saludamos en el nombre de nuestro Señor Jesucristo, el pasado 15 de mayo tuvimos nuestro servicio dirigido por nuestro Hermano Daniel Andrés encargado de la Iglesia en Tatahuicapan Veracruz, como parte de nuestra preparación para nuestra Comunión y Nuestra Convención. Nuestro hermano tomó la escritura de 1 de Corintios 11:23-29 donde nos explica la importancia que hay al tomar nuestra comunión en las condiciones correctas y la importancia de llegar a nuestra Convención con una entrega total a Dios.

En la escritura de Cantares 2:8-10 nuestro Hno. Daniel Andrés nos hacía ver que nuestro escenario ya había cambiado y que nuestro escenario en nuestras vidas igual tenía que cambiar (10 Mi amado habló, y me dijo: Levántate, oh amiga mía, hermosa mía, y ven.). Dios ya nos estaba llamando a una rendición mayor a un cambio de vida.

Al termino de nuestro servicio tuvimos el rebautizo de un joven a quien Dios ha tocado su corazón y lo ha llamado de vuelta al servicio de nuestro Señor Jesucristo, sin duda, Dios está llamando a un regreso a casa a nuestros jóvenes.

En continuidad de nuestra preparación nuestro pastor llevó a cabo una serie de pláticas por separado los días 16, 17 y 18 de mayo (adultos, jóvenes y niños). Los padres somos los primeros que debemos tener una vida rendida a Dios ya que como pastores de nuestra misma casa dirigimos a nuestra familia hacia delante, nuestros jóvenes no estarían batallando si un padre estuviera a la expectativa de su hijo o hija, los jóvenes son parte importante en nuestras iglesias y han sido duramente peleados por el enemigo pero ha llegado este tiempo en el cual no podemos permitir que nuestros jóvenes se desvíen ya que también viene una generación de pequeños guerreros que los observan que algunos quieren seguir los pasos del padre, del joven y debemos ser el ejemplo perfecto para ellos. Debemos ser verdaderos cristianos en este tiempo del fin.

Un saludo y Dios los bendiga grandemente