Visita Apostólica

José Núñez Yáñez
Tuxtla Gutiérrez, Chiapas. | 02 de Diciembre del 2016
TCTG
Fotógrafo: Gildardo Alegría Cruz

Hermano Elmer Méndez

"El Valor de la Voz"

1ª Corintios 14:7-11

Ciertamente las cosas inanimadas que producen sonidos, como la flauta o la cítara, si no dieren distinción de voces, ¿cómo se sabrá lo que se toca con la flauta o con la cítara?  Y si la trompeta diere sonido incierto, ¿quién se preparará para la batalla?  Así también vosotros, si por la lengua

no diereis palabra bien comprensible, ¿cómo se entenderá lo que decís? Porque hablaréis al aire.
Tantas clases de idiomas hay, seguramente, en el mundo, y ninguno de ellos carece de significado.
Pero si yo ignoro el valor de las palabras, seré como extranjero para el que habla, y el que habla será como extranjero para mí.

El pasado domingo 27 de noviembre del presente año tuvimos la visita de nuestro Hno. Elmer Méndez López, pastor del Tabernáculo de la Ciudad de Tapachula y apóstol de nuestro Señor Jesucristo, juntamente con su esposa y sus hijos.

Con la finalidad de fortalecer a nuestra Iglesia, nuestro hermano abordó un hermoso tema titulado: “EL VALOR DE LA VOZ”, tomando como base la escritura levantada en la pasada Reunión Ministerial Nacional 1ª Corintios 14:7-11, con lo cual hizo énfasis en que hoy más que nunca es esencial, darle la importancia que merece a este Mensaje de vida, y de igual manera, entender cuál es la voz que estamos escuchando, ya que hoy en día existen innumerables voces que degradan la condición de la Iglesia, haciéndonos dudar cuando escuchamos la voz de Dios. Mencionó que: “si realmente entendemos lo que dice la verdadera voz de Dios y por consiguiente hemos hecho caso a la voz en este tiempo, debemos darnos cuenta de que hoy no es una voz profética la que nos está hablando, sino que hoy es una voz apostólica. En nuestro tiempo, es la voz de Dios en los apóstoles dándole continuidad a lo que nuestro profeta trajo”.

De esta manera la Iglesia del Señor en Tuxtla Gutiérrez, se fortaleció con esta visita y agradecemos en sobremanera, el trabajo del cuerpo apostólico en todo el país.

Compartimos este reporte con esperando sea de bendición para cada uno de ustedes. ¡Dios les bendiga!