Los pasados días 1 y 2 de octubre 2016, tuvimos la dicha de tener entre nosotros al Hno. Obed Garduza y familia, acompañados de un equipo de hermanos del Tabernáculo de la Ciudad de Coatzacoalcos, Ver.

Para el día sábado, nuestro Hno. Obed impartió a la Iglesia el tema “Tiempo de Formación Pastoral e Iglesia”, tomando las escrituras de San Juan 10:1-18 y Hebreos 13:17, donde explicó que la palabra “formar” significa darle forma a algo, crear, desarrollar, educar y adiestrar, comentando que darle formación a un pastor es darle la oportunidad de trabajar en los hogares y que si hay un buen pastor habrá una buena iglesia y que ella es quien forma al pastor y el pastor a la Iglesia. Retomó y nos recordó que este es el tiempo de trabajar como verdaderos amigos y compañeros de batalla. Comentó que Dios demanda un nuevo tiempo y que requiere de una nueva generación pastoral y de una nueva iglesia.

El día domingo 2 de octubre en el servicio matutino, levantó el tema “De lo viejo a lo nuevo” con el subtema “Más sinceridad”, tomando como base las escrituras Efesios 2:20 y Eclesiastés 3:8, donde mencionó que: “una gran unidad es conformada de la unión del corazón de la iglesia hacia el pastor y del corazón del pastor hacia Dios; este entronque de tiempo demanda una mayor sinceridad y renovar todo aquello que se ha vuelto viejo en nosotros, para eso se requiere ser honesto consigo mismo y con Dios, despojándonos de nuestros viejos hábitos y costumbres que se han convertido en una creencia religiosa. Mencionó que como Iglesia, es necesario lograr la promesa del nuevo nacimiento para después alcanzar el bautismo del Espíritu Santo si queremos llegar a obtener el establecimiento de la Iglesia. Dios requiere hombres de valor, de fe, con entendimiento que se conviertan en los conductos de vida para compartirle a la gente. Se demandan matrimonios definidos que se conviertan en colaboradores del ministerio”.

Este domingo por la tarde, se cerró el trabajo con una plática enfocada a la economía tomando la escritura en Proverbios 11:14 y 11:24-28 donde el Hno. Obed, habló que la iglesia debe contar con un escudo y para ello se requiere de una economía sana, lo cual, se logra poniendo a Dios en primer lugar, posteriormente a la familia y al final uno mismo. Aclaró, que se requiere contar con dos economías, una para Dios y la otra para el hogar, porque enfrentamos un reto muy fuerte. Enseñó que debemos primero aprender a ganar dinero, posteriormente a saber invertirlo y por ultimó saber disfrutarlo.
Concluyendo, agradecemos a Dios porque ésta visita fue de gran fortalecimiento para la misión y también damos las gracias a nuestro Pastor el Hno. Ángel Santiago, por su apoyo incondicional, al Hno. Jorge Santiago, pastor asociado y a toda su Iglesia, así como al Hno. Moisés Barahona, Pastor del Tabernáculo de Tatahuicapan, al igual que a nuestro Hno. Tomas Andrés Serapio pastor del Tabernáculo de Coatzacoalcos Ver.  Dios les bendiga.